Contrario a lo que muchas personas creen, no todas las deudas son malas, incluso existen deudas que en ciertos casos podríamos considerar como buenas, pero antes de hablar de ellas, primero veamos qué es una deuda mala.
Generalmente, una deuda mala tiene una o varias de las siguientes características:
¿Crees que una vida sin esos “pequeños lujos” es privarte de muchas cosas? Es válido pensarlo, pero en realidad es exactamente al revés: cuando te endeudas en cosas por las que pudiste haber ahorrado, que no eran necesarias o que están fuera de tu alcance es cuando terminas privándote de metas mucho más ambiciosas e importantes, ¡piénsalo!
Por su parte, una deuda buena se distingue por contar con una o varias de las siguientes características:
Saber si un crédito es bueno o malo para tus finanzas puede ser complejo, ya que debes considerar tu contexto y una serie de variables específicas para determinarlo.
Sin embargo, con el ánimo de brindarte una guía rápida, aquí te compartimos bajo qué escenarios pueden ser una buena y una mala deuda los créditos hipotecarios y automotrices, así como las tarjetas de crédito:
¿Quieres saber si una deuda es buena o mala? Responde el siguiente test para descubrirlo:
1. ¿Cuál es el objetivo de la deuda?
a) Adquirir algo que aumentará de valor con el paso del tiempo.
b) Cubrir gastos no esenciales, como compras en línea.
c) Cubrir gastos esenciales, como alimentos y servicios básicos.
2. ¿Podrás pagarla en tiempo y forma?
a) Sí, tengo contemplados los pagos en mi presupuesto.
b) No estoy muy seguro, pero yo creo que sí.
c) Tendré dificultades para hacerlo.
3. ¿Cuánto pagarías de intereses?
a) De 0% a 29% anual.
b) De 30% a 49% anual.
c) De 50% o más.
4. ¿Cuál de las siguientes afirmaciones describe mejor tu situación?
a) Puedo hacer el pago mensual con cierta holgura.
b) Puedo hacer el pago mensual, pero tengo que recortar otros gastos.
c) Puedo hacer el pago mensual si elimino varios de mis gastos actuales.
5. ¿Es para algo que podrías conseguir a mediano o largo plazo ahorrando?
a) No.
b) Tal vez.
c) Sí.
Resultados: si la mayoría de tus respuestas fueron “a”, es probable que la deuda sea buena. Por el contrario, si la mayoría de tus respuestas oscilaron entre “b” y “c”, es probable que la deuda sea mala. Sin embargo, no pierdas de vista que este es un test meramente informativo y que la correcta clasificación de una deuda puede ser más compleja.